Después de que un chef mime cada uno de los detalles de su plato, la calidad de la fotografía gastronómica que se realice tiene que estar a la altura.
Y es que hay que conseguir que una imagen que se va a ver en papel o en una pantalla, transmita al espectador todos los matices del plato para que lo sienta, casi, casi, como si lo tuviera delante.
Y esto no es nada fácil.

¿Qué vas a encontrar en este artículo?
La suerte que tenemos con la gastronomía de Cantabria
Cantabria es una tierra de alimentos de gran calidad, lo que es una base fundamental en toda cocina a la hora de crear un buen plato:
- Pescados: lubinas, merluzas, bonitos, bocartes, maganos, pulpos, etc.
- Mariscos: almejas, mejillones, nécoras, centollos, percebes, cigalas, bogavantes, etc.
- Carnes: principalmente de vacuno sobre todo de vaca tudanca, pero también cerdo y jabalí.
- Quesos: queso de nata, picón, etc
- Bebidas: donde destaca el orujo, aunque también se hacen reconocidos vinos en Cantabria.
- Miel: incluso con denominación de origen protegida.
Y gracias en parte a estos alimentos, y claro al talento, en Cantabria contamos con varios restaurantes que son Estrella Michelín: Annua (2), Cenador de Amós (3), La bicicleta (1), El Serbal (1), El Nuevo Molino (1), Solana (1).

Detalles a considerar en las fotos de comida
¿Un foto de un plato de comida puede hacer salivar y así despertar el interés del espectador?.
Rotundamente sí, porque una imagen transmite mucho más rápido que las palabras, y si esto se consigue, el trabajo del fotógrafo gastronómico está bien hecho.
Para ello, además de un buen plato, es necesaria una buena ejecución de la fotografía gastronómica, con un emplatado perfeto, con el atrezzo necesario, con una gran iluminación que resalte colores y texturas, y con la composición más adecuada al tipo de comida, que saque todo eso que muchas veces es difícil explicar con palabras.

¿Por qué un restaurante tiene que tener buenas fotos de sus platos de comida?
Está a la orden del día , y va a más, el uso de internet y de los teléfonos móviles para prácticamente todo, incluso para buscar sitios donde comer cerca de nuestra ubicación.
Debido a esto, es de vital importancia para cualquier restaurante el tener unas magníficas imágenes de lo que se puede comer allí que represente fielmente la realidad.
Porque no hay nada peor que dejar que un usuario (o pero aún, un «local guide») suba una mala foto de un plato o ración, aún en una buena reseña, que pueda ser vista por miles y miles de personas, y que no deje en buen lugar al restaurante.

Las fotografías del restaurante también son importantes
Además de la comida, que se supone buena, también el ambiente y los profesionales forman parte necesaria de la buena experiencia del comensal, por lo que también un fotógrafo gastronómico tiene que tener buena mano, además de con los platos de comida, con las personas y los espacios.
Unas buenas fotos de la cocina, de las mesas, del equipo de profesionales, es clave a la hora de atraer a un posible cliente al restaurante.
O por el contrario, si estás fotografías no son adecuadas, asustarle y que termine consumiendo en un restaurante de la competencia.

Las fotos gastronómicas no sólo son imágenes de comida
Tras estas pequeñas pinceladas, resumir que la fotografía gastronómica no sólo son fotos de platos de comida y de alimentos:
Han de transmitir al espectador.
Además, también es clave todo lo que rodea a la comida y forma parte esencial de la experiencia de un comensal.
Unas buenas fotos culinarias siempre transmiten confianza.

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Cantabria Cloud
Excelente todas las fotos, Mario, pero especialmente la de nuestros amigos del Cenador, con Jesús a la cabeza. La mejor forma de explicar esta foto (para nosotros) es que tiene ALMA. Alucinante. Grandísimo trabajo.
Mario Setien
Gracias por los comentarios. Cuando necesitéis algo especial por esta zona para algún cliente vuestro, o si un día queréis charlar o lo que sea, ya sabéis por dónde estoy.
Saludos
Mario